LA AUDIENCIA DE CANTABRIA SENTENCIA QUE LA VENTA DE PREFERENTES DE BANKIA FUE ‘MALICIOSA’
El subdirector de la oficina reconoció que se comercializaron como producto “amortizable con liquidez en 48 horas”
La Audiencia Provincial de Cantabria da un nuevo varapalo a bankia por la comercialización de las preferentes de Caja Madrid (hoy Bankia). En una reciente sentencia de la sección 4ª censura que “se incitara a contratar como si fuera un depósito”. La sentencia – que confirma una primera instancia del juzgado de instrucción nº1 de Laredo- critica que “se incitara a contratar a quien por sus condiciones y medios no puede razonablemente hacerse una idea cabal del contrato y de los riesgos”, y concluye que el sistema de comercialización de las preferentes por parte de la entidad “entraña malicia”. La sentencia califica de “factor distorsionante” el hecho de “diluir la relevancia de la oferta comercial mediante la ubicación de las cláusulas con profusión de datos no siempre fáciles de entender para quien carece de conocimientos especializados”.
La sentencia considera probado que el director de la sucursal comercializó las preferentes como un “producto amortizable, con liquidez en 48 horas”. No se informó que se trataba de un producto de carácter perpetuo, cuya rentabilidad dependía de los beneficios de la entidad y con riesgo de perder incluso el capital invertido. En tal caso, nunca se habría contratado, concluye el fallo, que recuerda que la iniciativa de la contratación partió de un empleado de la entidad.
La sentencia confirma que el error de la afectada fue “sustancial y excusable” y que por lo tanto el contrato fue nulo, condenando a Bankia a devolver el dinero invertido, abonar el interés legal del dinero y las costas del recurso de alzada.
Además, frente a la objeción de Bankia de la claridad de la información, la Audiencia Provincial de Cantabria califica de “factor distorsionante” el hecho de “diluir la relevancia de la oferta comercial mediante la ubicación de las cláusulas con profusión de datos no siempre fáciles de entender para quien carece de conocimientos especializados”. Es el caso de la sentencia pues se trataba de una clienta sin estudios, ni experiencia en productos de riesgo.
No Comment
You can post first response comment.